Lo comentábamos en un artículo anterior , la piel de los hombres se diferencia de la de las mujeres en que es más grasa, porque es más rica en glándulas sebáceas, encargadas de la producción de sebo. También es más grueso, porque la epidermis es más gruesa. Por no hablar del sistema capilar, que es una protección natural contra el sol y las agresiones externas, pero que es causa de irritación al afeitarse, especialmente a diario. Por tanto, debemos favorecer los agentes hidratantes , porque una piel más grasa no significa que esté más hidratada (ácido hialurónico o glicerina por ejemplo). También veremos agentes exfoliantes , como los ácidos de frutas, para afinar la capa más externa de la epidermis, compuesta principalmente por células muertas. Por último, los agentes calmantes son necesarios especialmente para la piel irritada por el afeitado.
Rutina de limpieza
Es fundamental limpiar bien el rostro por la mañana, para eliminar el exceso de sebo producido por la noche así como las células muertas resultantes de la diferenciación epidérmica. El Limpiador Facial en Espuma se aplica en la ducha, masajeando una pequeña cantidad de espuma sobre el rostro y luego enjuagando abundantemente. Definitivamente no debes usar un jabón corporal para la cara, ya que esto corre el riesgo de resecar la piel del rostro debido a los tensioactivos que contiene y su pH alcalino.
Si tu piel es seca o tiende a ser seca, debes utilizar en su lugar la Crema Limpiadora Facial , cuya textura en crema ayuda a fortalecer y reconstruir la barrera hidrolipídica para mantener una buena hidratación y luchar contra la sequedad de la piel. Aplicar un poco de crema en el rostro masajeando y luego enjuagar abundantemente.
Además del cuidado diario, es necesario aplicar una o dos veces por semana una Mascarilla Exfoliante Mineralizante que eliminará los restos de impurezas y dejará un efecto de piel nueva y profundamente limpia, a la vez que aportará los minerales necesarios para el correcto equilibrio del pH. Aplicar un poco de la mascarilla compuesta de caolín blanco y arena volcánica, masajeando suavemente de forma circular antes de enjuagar abundantemente.
Hidratar y calmar
Después de cada lavado, hidrata bien tu rostro con la crema hidratante adecuada a tu piel. Hydra Gel-Cream es un complejo natural de activos antioxidantes e hidratantes necesarios para proteger tu rostro de forma duradera y ligera. Para pieles exigentes, o con tendencia a la sequedad, aplicaremos adicionalmente el Sérum Age-Defense por la noche.
Cuidado adaptado al tipo de piel
Los diferentes tipos de piel están determinados en parte por la genética, pero también por el estilo de vida. Tu piel estará expuesta a la contaminación del aire y a las micropartículas en un entorno urbano, estará aún más debilitada si se expone al polvo o al sol, responsables del envejecimiento cutáneo en el 80% de los casos. El frío, el viento, la humedad, el estrés, la falta de sueño, el tabaco, la dieta, el tabaco, el alcohol… repercutirán en la salud de tu piel. Estos factores son responsables del envejecimiento prematuro de la piel, la tez gris y el enrojecimiento.
Consejos y trucos
Lavarse la cara sólo con agua del grifo no limpiará profundamente su piel y el agua tenderá a secarla.
Después de cada enjuague con agua limpia, secar la piel con una toalla limpia, sin frotar, simplemente dando toquecitos en el rostro.
Evita tocarte demasiado la cara, porque además del ambiente que contaminará tu piel, tus dedos depositarán microbios y bacterias de todo tipo.
Una dieta sana y equilibrada dará como resultado una piel bonita: las frutas aportan las vitaminas necesarias y los vegetales fibra para mantener la microbiota intestinal, ácidos grasos esenciales, omega 3 y omega 6, por su actividad hidratante y antiinflamatoria.
Por último, la actividad deportiva regular y la hidratación son fundamentales para el buen funcionamiento de tu piel.